Lesiones catastróficas en menores

Los niños que sufren lesiones, ya sea por hospitales, médicos o por otros accidentes, pueden reclamar por lesiones hasta que cumplan 22 años en la mayoría de las circunstancias según la legislación de Puerto Rico. Las lesiones infantiles pueden ser consecuencia de una caída en un parque infantil inseguro, una zona de juegos de un restaurante o de comida rápida, una piscina o establecimientos diseñados para atraer a los niños. Los traumatismos craneoencefálicos pueden provocar hematomas subdurales no detectados, que pueden tardar días, semanas o meses antes de que los síntomas físicos sean evidentes o pueda evaluarse el daño neurológico. Hay juguetes peligrosos que, por su diseño, uso o contenido, pueden causar lesiones y pueden ser objeto de demandas de responsabilidad por productos defectuosos. Algunos juguetes contienen materiales peligrosos, como plomo, esmalte de uñas de secado rápido o imanes, que pueden exponer a los niños a daños. Además de sufrir una intoxicación por plomo u otras sustancias químicas tóxicas, los niños pueden sufrir una obstrucción intestinal que a menudo se asemeja a los síntomas de la gripe. Estas lesiones pueden ser catastróficas y necesitar atención sanitaria más allá de la esperanza de vida de los padres, por lo que puede ser necesario un planificador de la atención vital como parte del equipo evaluador. Cuando se trata de una negligencia médica u hospitalaria, estos casos requieren que los abogados que se ocupan de ellos conozcan la ciencia y las razones médicas de la negligencia. Tenemos experiencia en la tramitación de casos en los que los historiales médicos han sido alterados o manipulados. El tratamiento de estos casos requiere recursos, trabajo duro y paciencia. Las reclamaciones en este ámbito incluyen lesiones cerebrales traumáticas (LCT), parálisis cerebral, lesiones nerviosas, infección, lesiones medulares, epilepsia, convulsiones, asfixia del parto, encefalopatía isquémica hipóxica, rotura de miembros, parálisis de Erb, parálisis de Klumpke, traumatismo autista del parto, distocia de hombros y lesiones del plexo braquial. Pueden producirse muertes o lesiones fetales, por ejemplo, como consecuencia de una monitorización inadecuada, una inducción incorrecta del parto o la administración de cytotec; cetoacidosis diabética, compresión de la médula espinal, parálisis cerebral. A veces, la lesión catastrófica provoca amputación, paraplejia o incluso tetraplejia, que requieren cuidados a largo plazo. Normalmente, estas lesiones son consecuencia de problemas durante el embarazo, el parto y las operaciones que se producen al principio de la vida del bebé. Puede haberse producido una pérdida de oxígeno o hipoxia durante la anestesia o un parto inadecuado en la sala de partos. Vigila atentamente el estado de tu hijo para evaluar cualquier síntoma o condición anormal y busca atención médica si tienes alguna duda. La documentación, los historiales médicos y los contactos con los médicos son muy importantes para llevar estos casos. Los accidentes en los que interviene la negligencia de alguien o de alguna empresa también pueden causar lesiones catastróficas. Pueden incluir lesiones cerebrales traumáticas, esguinces cervicales, lesiones de la columna cervical, lesiones de la médula espinal, tetraplejia, paraplejia, amputación y lesiones craneales cerradas que causan déficits cognitivos. Estas lesiones requieren cuidados durante toda la vida y la carga emocional y económica que suponen para una familia es indescriptible. Sólo persiguiendo estos derechos en nombre del menor pueden estas familias atender adecuadamente a estos niños y niñas. Si tu hijo, hija, nieto u otro familiar ha sido víctima de una negligencia médica o ha sufrido algún tipo de lesión potencialmente mortal o catastrófica, Indiano & Williams puede ayudarte a evaluar si tienes una reclamación válida que pueda presentarse y tramitarse en Puerto Rico.